Alcalá de Henares recupera la figura de la pionera María Ramírez, una impresora de la época de Cervantes

Con motivo de este Día Internacional de la Mujer, Alcalá de Henares recupera a una mujer pionera en su campo: la impresora María Ramírez, quien asumió las riendas del negocio tras el fallecimiento de su marido, Juan Gracián, y llegó a firmar los pies de imprenta con su nombre en el siglo XVII, algo completamente inusual en las mujeres de su época que solían aparecer como «viuda de».

En representación de todas las mujeres sin nombre a lo largo de la historia, el centro comercial Quadernillos ha decidido bautizar su plaza central como “Plaza de la impresora María Ramírez”. Y lo ha hecho además con una madrina de excepción: la novelista e historiadora Olalla García, quien entre su amplia producción literaria dedicó una novela histórica al mundo de la impresión con El taller de libros prohibidos (Ed. B), en cuyas páginas aparece el personaje de María Ramírez.

“Es especialmente significativo que una escritora reconocida en nuestros días sea la encargada de descubrir la placa de la plaza que homenajea a la impresora coetánea de Cervantes que desafío el sistema patriarcal queriendo firmar sus ediciones con su nombre”, destaca la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Alcalá, Patricia Sánchez.

En palabras de Enrique Biel, Director de Asset Management de Temprano Capital Partners, compañía propietaria de Quadernillos, “con este sencillo gesto queremos recuperar el nombre de una mujer pionera de Alcalá de Henares y es algo que nos hace mucha ilusión y que vincula a Quadernillos con la rica historia de la ciudad”.

Por su parte la escritora Olalla García recuerda el importante papel de la impresora María Ramírez y destaca que “gracias a su acto individualista conocemos su nombre. Mientras que, a día de hoy, seguimos ignorando los de la mayoría de las impresoras de su tiempo. Por eso, recuperando la figura de la impresora María Ramírez, Quadernillos le da voz a todas sus compañeras de profesión”.

Una pionera encuentra su espacio en un centro pionero
La nueva Plaza de la Impresora María Ramírez de Quadernillos es el corazón de un parque comercial abierto que, gracias a sus amplios espacios al aire libre y zonas de terrazas ha podido sobrevivir a los efectos del Covid-19 en mejores condiciones que otros centros comerciales. Esos elementos de configuración sumados a medidas de choque como la condonación de los alquileres de los comercios durante los meses más duros del confinamiento y a ayudas a los negocios más afectados por las restricciones covid han convertido a Quadernillos en una rara avis de los centros comerciales de Madrid: tras un año de pandemia ni una sola de sus marcas ha tenido que echar el cierre.

Tal y como destaca el gerente de Quadernillos, David Muiños, “2020 fue muy duro y el comienzo de 2021 no está siendo fácil tampoco, pero Quadernillos es un centro muy especial como demuestran que nuestros descensos de afluencia hayan sido mucho menores que en otros centros comerciales y que ni uno solo de nuestros inquilinos haya cerrado”.

La apuesta por el aire libre y un modelo plenamente compatible con la situación de pandemia se han visto incluso reforzadas en 2020 con medidas a contracorriente con respecto a otros centros comerciales. “Mientras en otros centros se ha retraído la inversión, en Quadernillos se ha innovado y por ejemplo hemos creado el mayor sports bar al aire libre de todo el este de Madrid, con una terraza para más de 80 plazas y con una pantalla gigante de 15 m2”, señala Enrique Biel.


Fuente original: Comunicae.es.

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